Maria eiwa sesion

Método Eiwa

Facebook
Twitter
LinkedIn
Email

¡Y qué sorpresas nos da la vida, y cuánto cuesta aceptar lo que estamos viviendo, hasta que por fin comprendemos el para qué!

El puente de la aceptación de todo aquello que nuestra mente y nuestros sentidos advierten en cada instante, debemos atravesarlo para conquistar ese aclamado estado de paz y armonía. El cambio es inevitable, y cuánto más consideremos la idea de que cada decisión tomada, configura un futuro diferente, más podremos ser co-creadores de nuestro mundo personal y colectivo.

Tras el pasado confinamiento, no cabe duda de cómo las casas han cobrado protagonismo desde el 2020. Aquellos hechos amenazaron con romper una inercia de muchos años y pudieron arrasar con tejados volátiles y romper ventanas. Las casas quedaron al desnudo, las estructuras se tambalearon, y los cimientos pusieron a prueba su resistencia y estabilidad. ¿Hablamos de casas, o de corazones humanos encogidos por el miedo? ¿y si fuera lo mismo? Nos llevaron sin escapatoria a replantearnos sobre el lugar físico donde habitábamos, y para los más osados, se puso en evidencia el estado de nuestra casa emocional y nuestras necesidades reales, nuestro Hogar. Las cuatro paredes nos recuerdan dónde están nuestros límites y hasta dónde conviene mantenerlos o traspasarlos.

 

Antes de salir al mundo, uno ha sido nutrido, protegido, alimentado con imágenes y lecciones de vida, en su nido natal. Generalmente, caemos en la cuenta sobre la influencia que hemos recibido y cómo hemos tomado prestadas muchas de las pautas de comportamiento, en momentos de crisis. Llega un punto,en el que ya no se puede sostener el modus operandi, pues los resultados que obtenemos, o el grado de insatisfacción se hace intolerable. Momento de decidir, si ser una réplica de nuestros ancestros, o actualizar programas y SER. Para ello, necesitamos de la mirada y escucha del otro, y que nos señale los puntos ciegos que no somos capaces de ver por nosotros mismos, pues supondría una amenaza para nuestro ego,o falso yo, quien defiende con uñas y dientes, su manera de estar en el mundo. Ese feedback puede llegar de una gran amiga, alguien de mucha confianza, o de un profesional que acompañe este proceso de cambio. Por este motivo nace el Método Eiwa, una combinación del crecimiento personal, decoración y diseño de interiores. La casa como símbolo de uno mismo, como espejo de nuestro cuerpo y mente, nos acoge y nos aporta la imagen que necesitamos ver, para dejar ir lo que ya ha caducado, y así evitar que el moho se extienda, y para potenciar lo que sí nos sirve y ensalzar nuestros talentos.

La casa de tus sueños ya existe en tu interior. Quitar las capas que la cubren, como hacía Miguel Ángel al esculpir su Moisés, sacará tanto a tu artista a la luz, como a tu verdadera esencia en todo su esplendor.

A propósito de los efectos secundarios del remedio Eiwa, os doy unas pinceladas de la reciente sesión Método Eiwa, en una casa de la sierra madrileña.

Con mucha ilusión y empeño, una cliente se ha comprado una casa, tras la muerte de su madre. En un enclave cuajado de encinas y granito, la nueva propietaria, decide darle un lavado de cara general, aunque al principio se mostrara algo reticente. En las primeras charlas, aún se percibía en su puesta en escena, los últimos coletazos de una rebelde adolescente . Había sido amor a primera vista, y aconsejada por su intuición, no dudó en comprarla. Aquellas paredes y estancias luminosas, apenas se habían visto afectadas por las obras desde su construcción, ni tan siquiera las básicas de mantenimiento. ¡Pedía a gritos una transformación integral! Lo que esta valiente, en los albores de los cuarenta

,aún no alcanzaba a ver, es que este paso de oruga a mariposa, lo viviría en su propia piel. Momento actual, Reformas Crisálida. Mientras tanto, deshace en el capullo, (su casa

 

actual), los nudos emocionales. Se enrolará de nuevo, con nuevas perspectivas, y habiendo reformulado sus deseos.Esta vez, ligera de equipaje.

 

Vivir el duelo de su madre de esta manera creativa, y más consciente, genera un espacio amable para quedar en paz con ella, y de agradecimiento sin resquemor. Si las madres nos dan la vida, qué mejor forma de poder tomarla con los brazos extendidos y mostrar, desde esta humilde receptividad, la gratitud. Reconocer nuestra propia existencia con todo su Valor, con nuestras luces y con nuestras sombras, en toda su magnitud. Acomodar un espacio nuevo, ya es en sí un proceso que facilita el renacimiento.

En el caso de esta cliente, como la vida no le dio hijos, desde un rechazo a ser madre, se relaciona ahora con una pareja que sí los tiene, y así todos sus temores más profundos, pueden ser atendidos. A lo que te resistes, persiste, como decía Jung, ¿te suena?

Desidentificarse de las etiquetas que se han acumulado en su historia personal, le da permiso para conectar con una libertad más auténtica, y puede descansar la que busca paz, la que vive desde su incansable viajera, con tantos ires y venires, en movimiento agitado.

Dejar atrás el modo huida, aprendido como estrategia de supervivencia.

Pues sí, ¡qué gran transformación la que está haciendo para avanzar desde lo que realmente Es!

 

 

Y ahora bien, todas las inquietudes y curiosidades de la consultante, se palpan en las charlas que mantenemos de una manera simbólica, y el inconsciente se expresa en su propio lenguaje, a sus anchas. Lo que la casa representa para ella y las decisiones que tiene que tomar en cuanto a los diferentes espacios, colores, texturas…están alineadas con el personaje que quiere ser entendido y por fin escuchado. “No sé si tirar esta pared, si dejar los armarios empotrados, si mover la puerta de entrada…” Conforme se va dando voz a cualquier pensamiento o emoción, o idea genial, se traza un plan de diseño, de acción y ¡al lío!

 

¿Acaso no es la conexión, lo que el ser humano busca y teme al mismo tiempo? Paradojas de la vida. Está siendo todo un vaivén de emociones y cascadas de imágenes, que al derramarse sin estrecheces, se aceptan sin emitir juicios, y se trascienden.

La vuelta a casa y un torrente de PAZ , mientras se construye su nido, será lo que verá, olerá y sentirá, el día que haga las maletas y de el primer paso en este nuevo precioso HOGAR.

El método Eiwa te brinda la oportunidad de volver a Casa, de volver al Origen y de conectar contigo misma y por ende con los demás.

 

María Eiwa

María Eiwa

María Eiwa

Deco-coaching, terapeuta transpersonal, coaching artístico & emocional.

Más artículos que te pueden interesar:

una foto al azar, maria eiwa

Una foto al azar

A simple vista podríamos captar la luminosidad y sensación de amplitud.  Un intento de romper la rigidez que se palpa, con el

Seguir leyendo
Scroll al inicio
Hola! ¿Cómo te puedo ayudar?